Nombre | Tannat Viejo |
Bodega | |
Año | 2005 |
Variedad | Tannat |
Percepción
Hace mucho tiempo que tenía ganas de probar este Tannat. Con Vale – mi compañera de vida y de vino – estamos en una reconciliación con el Tannat que viene viento en popa – hasta hace un tiempo éramos otros de esos uruguayos que decían “el tannat no me gusta porque es fuerte y tánico”, el problema no es “el tannat” sino los tannat que habíamos probado. De un tiempo a esta parte decidimos proba vinos tannat conocidos como buenos, muy buenos o excelentes y la verdad que debemos decir que nos gusta el Tannat.
El problema ahora que he probado el Tannat Viejo es que tengo miedo. En mi “bodeguita casera” tengo un Tannat Daymán y un Dinastía y el Tannat Viejo está tan pero tan bueno que tengo un poco de miedo de lo bueno que pueden estar estos otros y de si yo voy a poder apreciarlos…
Al colocar el Tannat Viejo en el decanter uno ya podía anticipar su cuerpo pleno, se notaba en su voluminosidad y su estructura “aceitosa”. Luego de una hora y media tomando oxígeno llegó a la copa, el color violeta profundo impresionaba y ya en nariz se podía percibir su dulzura y redondez.
Por fin llegó el momento de probarlo en boca y fue increíble. Mermeladas de arándanos, de moras, vainilla y muchos sabores más fueron apareciendo en un vino generoso, redondo, equilibrado, sin nada que tapara nada, madera y fruta totalmente equilibradas, cada una brindando lo suyo para deleitar con un vino excelente.
En fin, no se queden sin probar este Tannat y reconcíliense con esta noble variedad.
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